jueves, 28 de noviembre de 2013

LA FUERZA DE LOS SUEÑOS…



LA FUERZA DE LOS SUEÑOS…

(A mi hijo “Manu” con el que bajaré,
quizás, mis últimos escalones).

Bajaba los escalones de dos en dos
  y en el río me atraía la fluidez del agua;
lo mismo me daba un camino en el llano
que en lo más encrespado de la montaña,
era como si tuvieran alas mis pies
  y por mis ojos fluyera la visión del águila.
No necesitaba para nada la luz…...
yo era la luz que mis pasos iluminaba.
Hoy, para bajar escaleras, necesito apoyo
  y me valgo de sus barandas,
pero me sigue acompañando la misma luz
que fue, es y será mi mejor aliada:
es la luz de mis sueños, que siempre vivos,
se incendiaron un día en mi alma…
…y yo seguiré el caminar de esos sueños
mientras haya una brizna de vida en mi entraña.



jueves, 7 de noviembre de 2013

¡POBRE CORAZON!




¡POBRE CORAZON!

Y ahora qué… ¡que le digo!
a mi pobre corazón
que se me ha quedado en el camino
roto de desesperación.
Que lejos está de la luna
de las estrellas y del fulgor
que cuando dos corazones
se juntan, hace brillar el sol.
En aquel camino se quedó una parte
y en este, a solas, me encuentro YO.




ABUELO.



ABUELO.

Hoy mi nieta, África, mi “chiquitina”
me ha llamado, por vez primera, Abuelo.
¿Que qué es lo que he sentido?
por lo pronto me he visto menos viejo
  y es que un flujo de sangre joven
ha recorrido los ríos de mi cuerpo.
Emociona ver que una niña
de apenas un año y medio, ...
alarga sus “bracitos” para abrazarte
  y llamarte con alegría, ¡Abuelo!
palabra que, a veces, se pronuncia mal
al confundirla con aquella de ¡viejo!
sin que nada tenga que ver la una
con la otra, no es igual viejo que Abuelo.
Con satisfacción y orgullo exclamo
  y lo digo así, porque así lo siento
que me gusta y me ilusiona
que me llamen de ese modo mis nietos.


lunes, 4 de noviembre de 2013

SOY COMO EL NIÑO…

SOY COMO EL NIÑO…

Soy como el niño que empieza
  y algunas cosas las hace a escondidas,
es como si después de tantos años
me estuviera iniciando en la vida.
Estoy descubriendo cosas que ignoraba
  o simplemente estaban dormidas…
pero el caso es que me gustan y
de los jóvenes no tengo envidia
¡Que más quisieran ellos que tener
las “vidas” que yo tengo vividas!
He sido pájaro, viento y luz…y
aunque también he sido herida,
le he ganado a la muerte,
no una, sino múltiples partidas,
lo que me permite llegar relajado
  y lleno a la que puede ser definitiva…
¡No me importan las cosas pasadas
  y si, y mucho, las que me queden de vida!.


domingo, 3 de noviembre de 2013

CEMENTERIOS.




CEMENTERIOS.

Ayer estuve en un cementerio
  y vi pasar gentes a montones;
muchos de ellos, entre risas,
en sus manos llevaban flores.
flores vestidas con plásticos
y, seguro, sin sus olores…
flores arrancadas a las luces
del día, para sumirlas en la noche…
  a la noche lóbrega de la muerte...
hay que ir con otras sensaciones;
llevar en el amor el recuerdo

  y dejar las flores para las flores.
Que estas, una vez marchitas
se volatizan sin emociones
cubriendo las tumbas de hojas muertas
  y recuerdos muertos, como las flores.