PREGUNTAS.
(A modo de Fábula)
Hubo, una vez, una ninfa
que se acercó a preguntarle a un río
el por qué del discurrir de sus aguas
sabiendo cual era su destino…
Aquel río sabía a la perfección
cual era el fin de su camino,
pero en el deambular de su cauce
dejaba jirones de sí mismo
... en el corazón de otras personas
que se le acercaban como amigos…
aquel río amaba a las gentes y sabiendo
sobradamente, cual era su destino,
seguía llenando de amor a quienes,
sin preguntas, encontraba en su camino.